Programa Construye Futuro de CMPC celebra tercer encuentro anual y supera los 1300 becados en seis años

· Con la participación de cerca de 400 jóvenes, el encuentro reunió a estudiantes de Biobío y La Araucanía en una jornada dedicada a fortalecer sus trayectorias universitarias y proyectar nuevas oportunidades de desarrollo.

· Además, en esta edición, el programa también dio la bienvenida a 93 nuevos becados, muchos de ellos provenientes de la comuna de Tirúa, Región del Biobío.

Más de un centenar de jóvenes se reunió en el Edificio Corporativo de CMPC en Los Ángeles para vivir el Tercer Encuentro Anual de Becados del Programa Construye Futuro CMPC, una iniciativa que, desde 2019, ha transformado la vida de estudiantes de sectores rurales del Biobío y La Araucanía, acompañándolos en su camino hacia la educación superior y la construcción de sus propios proyectos de vida.

El programa nació de una alianza entre CMPC y Fundación Portas, con una idea poderosa: que el talento está en todas partes, pero las oportunidades no. Desde entonces, el modelo de beca ha crecido para entregar apoyo económico, acompañamiento socioemocional, tutorías académicas y talleres de habilidades blandas. Un acompañamiento integral que busca que cada joven no solo ingrese a la educación superior, sino que logre adaptarse, permanecer y titularse a tiempo.

Un camino colectivo que ya suma más de 1.300 historias

Este año, el encuentro celebró un hito: 1.328 jóvenes han sido parte del programa desde su creación, y actualmente 852 estudiantes reciben acompañamiento activo desde sus distintas sedes en Cañete, Concepción, Los Ángeles, Temuco, Santiago y la plataforma virtual.

En esta edición, el programa también dio la bienvenida a 93 nuevos becados, muchos de ellos provenientes de la comuna de Tirúa, Región del Biobío, quienes se integran a una comunidad diversa de estudiantes que cursan carreras como salud, ingeniería, pedagogía, mecánica y administración. Para quienes ya egresaron, el impacto es concreto: 289 profesionales se han titulado ya gracias al programa, siendo en muchos casos la primera generación profesional de sus familias.

Un encuentro para mirarse, reconocer logros y preparar los próximos pasos

El encuentro constó de talleres, dinámicas grupales y conversaciones sinceras sobre adaptación universitaria, salud mental, inserción laboral y resiliencia, pilares fundamentales para asegurar trayectorias exitosas. Pero, además, los becados participaron en una jornada completa diseñada especialmente para fortalecer vínculos y celebrar el camino recorrido.

Fueron recibidos por el gerente general de CMPC, Francisco Ruiz-Tagle, y participaron en la charla “Mitos Forestales”, impartida por Jean Pierre Lasserre, gerente de Planificación y Tecnología Forestal de CMPC, para después vivir una conferencia motivacional del psicólogo deportivo Ricardo González. Posteriormente, fueron al exterior para un breve descanso y fueron guiados hacia una actividad dinámica que mezcló juegos, creatividad y trabajo en equipo, diseñada para construir confianza y generar nuevas redes entre estudiantes de distintas generaciones.

“No solo es un apoyo económico, sino también emocional”

Durante el encuentro nacional del programa, Antonella Toledo, oriunda de Mulchén, estudiante de Terapia Ocupacional de la Universidad Autónoma en Talca y becada del programa Construye Futuro compartió cómo ha vivido su proceso universitario lejos de casa y el rol que ha tenido la beca en su bienestar emocional y académico: “Ser parte del programa Construye Futuro ha sido totalmente valioso para mí, porque no solo es un apoyo económico, sino también emocional. Siento un acompañamiento constante: siempre están pendientes de cómo estoy, de cómo me va y de lo que necesito estando lejos de mi familia”.

Desde Tirúa y cursando ingeniería en Ejecución Industrial en la sede Cañete de la UCSC, Angélica Mari Leviqueo compartió cómo el programa se convirtió en un apoyo decisivo para ella y su familia, especialmente en tiempos difíciles y con los desafíos académicos de la pandemia: “En plena pandemia todo se volvió aún más difícil, y las tutorías fueron clave, especialmente en matemáticas, donde más lo necesitaba. Cuando supimos que había quedado en la beca, todos nos alegramos muchísimo”.